¿Por qué es importante acudir al podólogo?
El podólogo es la profesión mas desconocida a nivel de la salud, siendo el especialista médico encargado de tratar las afecciones y deformidades de los pies.
Suelen ser los grandes olvidados del cuerpo. Casi nadie se acuerda de ellos y quien lo hace, es hacia la temporada estival, cuando toca enseñarlos, ya sea en la playa o en la piscina. Y al ser los grandes olvidados por norma general suelen ser los grandes descuidados.
Por ello también necesitamos cuidarlos, siento el especialista adecuado el podólogo. Tienen muchas funciones como servirnos de soporte, nos dan sustento, nos aportan apoyo y equilibrio al resto del cuerpo. Y por supuesto nos llevan y nos traen.
Una pisada inadecuada puede llegar a generarnos problemas que no conciernen solo al pie; sino que pueden llegar a tobillo, rodilla, cadera e incluso espalda.
¿Cuándo acudir al podólogo?
El profesional podológico esta preparado para el “estudio, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades y alteraciones que afectan el pie”. Esté nos dará todas las pautas en cuanto a la prevención para evitar patologías en nuestros pies.
Entre los tratamientos de un podólogo pueden estar, uñas encarnadas, estudio de la pisada, estudio biomecánico, podología general (callos y durezas), cirugía, papilomas, hongos en las uñas, plantillas a medida…
Existen muchos problemas por los cuales podríamos ir a la consulta del podólogo siendo diferentes en cada etapa de la vida. Lo ideal es realizarse un reconocimiento anual de los pies aún sin sufrir ningún dolor tal y como lo hacemos en la seguridad social.
Cada etapa de la vida tiene su problemas…
A la pregunta, ¿Cuándo tengo que ir al podólogo? La respuesta seria en cada periodo de mi vida ya que en dependiendo que etapa estemos podremos sufrir unas patologías u otras.
En los bebes, encontramos la subespecialidad de Podopediatría donde se podrá valorar si todos sus reflejos están bien, si tuviera algún problema congénito a nivel del pie, como un equino varo…
Según se va creciendo, en los niños debemos estar muy pendientes en si se tropiezan mucho, sufren caídas, aparición de ampollas sin olvidarnos de los papilomas ya que se producen con mucha frecuencia en esta fase de crecimiento.
Por otro lado, la realización de un estudio de la pisada o biomecánico nos dará mucha información para valorar si el niño sufre de pie plano o cavo ya que en esta fase de crecimiento será corregible con el tratamiento de unas plantillas personalizadas.
En la adolescencia muchas personas empiezan a realizar actividad física más intensa o con más frecuencia y suelen aparecer patologías a nivel de la pisada, es recomendable realizarse un estudio de la pisada o biomecánico ya que con esto se evitarán lesiones futuras. A su vez, esta intensidad de ejercicio físico con el alboroto de hormonas que presentan es común encontrarnos la patología del pie de atleta, se detectará fácilmente encontrándonos enrojecimiento y picor entre los dedos.
Sin ninguna duda la edad más delicada es la tercera etapa de la vida o edad adulta cuando nuestro desarrollo ha terminado. Con el aumento excesivo de peso, botas de seguridad, tacones…sometemos al pie a una gran presión que normalmente la detectamos por el dolor.
A su vez, en muchas ocasiones encontramos durezas, uñas encarnadas, fascitis plantares, lesiones deportivas, hongos en las uñas….Todas ellas tienen tratamiento en el podólogo o bien con cirugía o estudios de la pisada, etcétera.
Por últimos encontramos las personas mayores en las cuales, toda esa grasa plantar que tenemos de manera natural y aparecen dolorosos callos. La osteoporosis tan conocida por todos nos genera en muchas ocasiones juanetes, dedos en martillo y deformidades propias de la edad. Siendo necesario acudir al especialista, el podólogo. Una buena forma de mejorar la calidad de vida de estos pacientes es con el podólogo a domicilio.
En conclusión podemos decir que acudir al podólogo nos ayudará a que nos de las pautas necesarias para tener una prevención suficiente evitando así problemas graves en un futuro.
